BALTIMORE, 11 de febrero de 2021 - Dos antiguas aliadas de Kennedy Krieger Institute donaron recientemente un total de $6.6 millones al Instituto, directamente de sus patrimonios. Una donación se utilizará para reclutar nuevos científicos; la otra, para apoyar el trabajo general de Kennedy Krieger.
Ambas donantes fueron mujeres que hicieron contribuciones modestas, pero continuas, durante toda su vida; sus donaciones caritativas apoyaron causas como la educación y la atención médica para niños, entre otras. Su generosidad también refleja una tendencia actual en filantropía que considera que las mujeres desempeñan un papel importante en las donaciones caritativas de una familia.
Cabe destacar que estas dos donaciones son los legados testamentarios más grandes de parte de donantes particulares en la historia del Instituto.
La Sra. Eleanor Black Requard de St. Michaels, Maryland, quien en vida fuera una educadora innovadora de Maryland, legó $5.4 millones a Kennedy Krieger para que los utilice en su prioridad estratégica de reclutamiento de nuevos docentes y científicos.
La Sra. Requard era originaria de Brooklyn, Nueva York, cuya familia llegó a Baltimore cuando su padre fue nombrado ingeniero jefe a cargo de supervisar la construcción de la planta de Domino Sugar. Se graduó de la Universidad Towson (anteriormente, Escuela Normal del Estado de Maryland) y obtuvo una maestría en Educación de la Universidad Johns Hopkins. Más adelante, trabajó como supervisora de la Junta de Educación de Baltimore antes de asumir la tarea de implementar el jardín de infantes en todo el sistema de escuelas públicas del condado de Baltimore.
La Sra. Audrey W. Clark de Glen Burnie, Maryland, legó $1.2 millones al Instituto. La única condición de la donación fue que se utilizara para financiar las mayores necesidades del Instituto.
La Sra. Clark trabajó como secretaria ejecutiva en B&O Railroad, y disfrutaba de ser voluntaria y pasar tiempo con su familia extendida.
Ambas mujeres fueron descritas por familiares y amigos como personas humildes que se preocupaban más por hacer donaciones a causas benéficas que por recibir reconocimiento por su generosidad.
"Estamos muy agradecidos por estas donaciones, que nos permitirán hacer grandes avances en nuestro trabajo", afirmó el Dr. Bradley Schlaggar, MD y PhD, presidente y director ejecutivo de Kennedy Krieger. "Pero fue igualmente gratificante saber que estas dos generosas donantes nos apoyaron durante toda su vida. En el caso de la Sra. Clark, ella fue donante durante más de 30 años. Ambas mujeres nos apoyaron firmemente durante décadas y sus donaciones testamentarias llegarán incluso a las generaciones futuras de pacientes y estudiantes".
Acerca de Kennedy Krieger Institute:
Kennedy Krieger Institute, una organización sin fines de lucro reconocida internacionalmente, ubicada en el área metropolitana de Baltimore-Washington, D.C., transforma la vida de más de 25,000 personas por año con terapias de bienestar, salud del comportamiento y servicios médicos para pacientes hospitalizados y ambulatorios, servicios comunitarios y en el hogar, programas en escuelas, capacitación y educación para profesionales, y defensa. Kennedy Krieger ofrece una gran variedad de servicios para niños, adolescentes y adultos con enfermedades, trastornos y lesiones que afectan el sistema nervioso, con diferentes niveles de gravedad. El Instituto reúne a un equipo de investigadores que contribuyen a la comprensión de cómo se desarrollan los trastornos y que, además, son pioneros en nuevas intervenciones y métodos de diagnóstico temprano, prevención y tratamiento.
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